"Porque el tiempo es vida, y la vida reside en el corazón" - Michael Ende

domingo, 23 de febrero de 2014

Gravedad (Física y Magia)

En aquel sitio aparentemente mejor,
habita el destino, el abrigo de mi corazón,
que duerme sola y yace paciente
a que viole leyes aceptadas por corrientes.

Observo su mundo, el mío y me abrumo,
me confundo quedando paralizado
ante banales razones sin fundamento
que dejan largos y eternos ocasos.

No luchamos contra sistemas artificiales,
sino contra putas leyes naturales.
Asfixian algo más que mis deseos,
propias voluntades que son frenadas en exceso.

Te escribo, en alcohol te ahogo,
te lloro y, en salado, te vuelvo a beber.
Te sangro en tinta que no borrarás
y en palomas mensajeras que no recibirás.

Bares que cierro mientras espero incierto,
una señal de tiempos perfectos
desde tu más allá...

Minutos que atan a afiladas agujas
de relojes malditos que, en tu lugar,
corren marcha atrás...

Observamos hacia estrellas que no lucen
y no nos corresponden con su luz.
Al igual que no lo hago yo,
al igual que no lo haces tú.

Volvamos a aquel yermo elevado,
donde tenía la ocasión de sonreir sin motivo
y ver cómo tú hacías tres cuartos de lo mismo,
cerrando, entre nosotros, un irrompible candado.

La llave se ha quebrado en mil pedazos
y el fuego se ha extinguido en la forja.
No permitiré que sólo queden vagos retazos
que lloremos en futuros pretéritos.

Saltaré hasta romper lo que nos separa
ya sea la gravedad, la física o la magia.
Llegaré hasta dónde estés...

Sea dónde sea ese paradero...espérame 
hasta que todo lo que digo y escribo
se torne verdadero.